En pleno siglo XXI, vivimos un gran furor por los animales de compañía, principalmente por perros y gatos. Sin embargo, según los expertos, estas adorables criaturas podrían estar viviendo una de sus peores épocas al lado de sus tutores. ¿Quieres conocer las causas? Te las diremos y te explicaremos cómo es que tu amor desmedido hacia tu mejor amigo le podría estar generando serios problemas.
¿Qué es humanizar a las mascotas?
Humanizar a las mascotas es tratarlas como si fueran personas, atribuyéndoles emociones, pensamientos y comportamientos que no corresponden con su naturaleza. Aquí te dejamos algunos ejemplos:
- Vestirlas con ropa humana: Aunque puede parecer tierno, no es necesario para ellas y puede ser incómodo o incluso peligroso.
- No dejarlas caminar o correr y transportarlas en carriolas: Limita su necesidad natural de ejercicio.
- Alimentarlas con comida humana: No está diseñada para sus necesidades nutricionales y puede provocar problemas de salud como obesidad, diabetes o trastornos digestivos.
- No permitirles que jueguen con otros animales y se ensucien: Restringe su socialización y comportamiento natural.
- Tratarlas como si pudieran comprender emociones humanas: Les hablamos como si fueran personas, les atribuimos sentimientos humanos y esperamos que reaccionen de la misma manera que nosotros.
- Demostrarles amor por medio de gestos que ellas no entienden: Abrazarlas y besarlas no es natural para ellas.
- Celebrar cumpleaños y fiestas al estilo humano: Aunque pueden ser momentos divertidos, no tienen un significado real para ellas.
- No dejar que salgan y socialicen: Restringe su libertad y comportamiento natural.
- Someterlas a tratamientos de relajación diseñados para humanos: No son adecuados para sus necesidades y pueden ser contraproducentes.
- Evitar que externen su naturaleza: Impedir que ladren, olfateen, maúllen o rasquen afecta su bienestar.
Los riesgos de humanizar a las mascotas
Si bien estas acciones pueden surgir del amor y la protección hacia ellas, también pueden tener consecuencias negativas en su bienestar físico y emocional, como:
- Frustración y ansiedad: Ante la insatisfacción de sus impulsos naturales.
- Comportamientos destructivos o agresivos: Debido a la falta de estimulación y ejercicio adecuado.
- Problemas de salud: Como obesidad, diabetes o problemas articulares por una alimentación inadecuada y falta de actividad.
¿Cómo puedes ayudar a tu mascota a ser más feliz?
Para evitar los riesgos de humanizar a las mascotas, es importante recordar que ellas tienen necesidades y comportamientos diferentes a los nuestros. Aquí algunos consejos:
- Permíteles ser animales: Deja que corran, jueguen, se ensucien y socialicen con otros animales.
- Proporciónales una dieta adecuada: Aliméntalos con comida diseñada específicamente para ellos.
- Respeta su espacio y comportamientos naturales: Deja que ladren, maúllen, olfateen y rasquen.
- Demuéstrales amor de manera que ellos entiendan: Caricias suaves, juegos y ejercicio son formas efectivas de mostrarles tu afecto.
Recuerda, el verdadero amor hacia tus mascotas es entender y respetar sus necesidades y naturaleza. Al hacerlo, contribuirás a su bienestar y felicidad.