AGENCIA
Internacional.- Rusia anunció el domingo que llevó a cabo con éxito un lanzamiento de prueba de un misil balístico intercontinental capaz de transportar ojivas nucleares desde un submarino nuclear de cuarta generación.
El lanzamiento del misil Bulava, el primero en aproximadamente un año, se produjo poco después de que Rusia revocara su ratificación del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (CTBT, por sus siglas en inglés).
Según el comunicado del Ministerio de Defensa ruso, “Como parte de la fase final del programa estatal de pruebas, el nuevo submarino nuclear estratégico Emperador Alejandro III disparó con éxito el misil balístico intercontinental Bulava” desde el Mar Blanco. El misil alcanzó su objetivo, situado en un campo de pruebas en la península de Kamchatka, en el Extremo Oriente ruso, “a la hora prevista”.
El Bulava, conocido como SS-NX-30 en la clasificación de la OTAN, tiene un alcance de 8 mil kilómetros y una longitud de 12 metros. Puede equiparse con hasta diez cabezas nucleares.
El submarino Emperador Alejandro III, de clase Borei, está equipado con 16 misiles Bulava, según el ejército ruso.
Desde el inicio del conflicto en Ucrania en febrero de 2022, altos funcionarios rusos han amenazado en varias ocasiones con utilizar armas nucleares, aunque en otras ocasiones el presidente Vladimir Putin ha mostrado cautela al respecto.
En un contexto de conflicto en Ucrania y tensiones con Occidente, Putin promulgó el jueves una ley que revoca la ratificación de Rusia del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares, a pesar de que nunca entró en vigor. El acuerdo fue ratificado por 178 países, incluidas las potencias nucleares Francia y Reino Unido, y tiene un valor simbólico.
La revocación de Rusia del CTBT fue percibida por los países occidentales como una señal negativa. El jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, declaró que Rusia dio “un gran paso en la dirección equivocada” y exhortó a Moscú a no realizar este tipo de ensayos.
Las acciones recientes de Rusia en el ámbito nuclear han suscitado preocupación y debate en la comunidad internacional en un momento en que persisten las tensiones geopolíticas.
