AGENCIA
Ucrania.- Las autoridades rusas anunciaron la captura de la pequeña localidad de Kreminna, misma que marcó el inicio de la anticipada gran ofensiva rusa en el Donbás, en el este de Ucrania, con los combates arreciando en la ciudad de Rubizhne.
Moscú ha reorientado su campaña a esta cuenca minera del este de Ucrania, nuevo epicentro del conflicto tras el repliegue de las fuerzas rusas del norte y de los alrededores de Kiev.
La ciudad de Kreminna se encuentra a orillas del río Donets, cuyo flujo discurre hacia Rubizhne, Severodonetsk y Lysychansk, ubicadas en la línea del frente y blanco de fuertes bombardeos de ambos bandos.
Rubizhne, con más de 60 mil residentes antes de la guerra, recibió desde ayer lunes intenso fuego de artillería y de morteros de las fuerzas ucranianas en la zona, particularmente desde la cercana localidad de Novodruzhesk, según la prensa en el lugar.
Esto deja al ejército del Kremlin a apenas 50 kilómetros al noreste de Kramatorsk, la capital de facto de la zona del Donbás controlada por Kiev y objetivo clave de Moscú.
Esta cuenca minera del este de Ucrania, donde se ubican las regiones de Lugansk y Donetsk, estaba parcialmente controlada por separatistas prorrusos desde 2014, cuando comenzó una guerra entre estos rebeldes y el gobierno de Kiev.