CDMX.– Roberto Borge Angulo pasó sus últimos días como prófugo de la justicia entre viajes al extranjero que incluían paseos y hospedaje de lujo.
El exgobernador de Quintana Roo fue detenido el pasado domingo en Panamá. Sobre él pesaba una Orden de Aprehensión, desde el pasado 31 de mayo, solicitada por la Procuraduría General de la República (PGR) por el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita.
El día de ayer Borge se negó a aceptar la extradición a México. Ante el Tribunal Superior de Apelación en Panamá, el priista respondió de manera negativa a la jueza Yiles Pitti sobre si aceptaba el envío a su País de origen.
El exfuncionario pretendía tomar el vuelo 4 o 5 de “Air France” para viajar de manera directa a la capital francesa.
El exMandatario se hospedó en la habitación 24 de la “Trump International Hotel & Tower Panamá”, ubicada en la calle Punta Colón, donde pagaba mil 700 dólares por noche (alrededor de 31 mil pesos mexicanos).
De acuerdo con un medio nacional, hasta hace unas semanas, Borge se paseaba “al mismo tiempo que la PGR armaba el expediente en su contra, a bordo del yate “Time Out”, su preferido en la “Royal Palm Marina” de Dania Beach, en Miami”, incluso, agregó el diario, se internó a México sin ser molestado.
La clave para dar con su paradero fueron sus colaboradores, a quienes utilizaba para hacer reservaciones de avión, pagar rentas de departamentos y noches de hotel, por lo que para el jueves la Agencia de Investigación Criminal, a través de la Interpol y la Policía panameña, lo tenían localizado. El subdirector de la Dirección de Investigación Judicial (DIJ), Manuel Bonome, dijo que el caso queda en manos del departamento de Asuntos Internacionales de la Procuraduría General de Panamá, que estará en comunicación con su par de México.
La PGR informó que ya inició los trámites para lograr la extradición de Borge.