AGENCIA
Nacional.- El empresario mexicano Ricardo Salinas Pliego, conocido por su estilo controvertido y sus opiniones directas, ha vuelto a ser el centro de atención tras lanzar una crítica al presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y a su gobierno por la recaudación de impuestos. En una publicación en su red social X, Salinas Pliego compartió una imagen sosteniendo una copa de tequila y expresó:
“Que tengan un excelente inicio de semana y que sus sueños se cumplan!!!… a menos que sean #Gobiernicolas queriendo robar al pueblo con los impuestos que se tiran a la basura en proyectos que no están terminados y no sirven de nada.”
Aunque su comentario podría ser interpretado como una crítica general hacia la administración pública, la mención a proyectos “no terminados” parece señalar directamente a iniciativas clave del gobierno de AMLO, como el Tren Maya y el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, que han sido objeto de críticas por su ejecución y efectividad.
Esta no es la primera vez que Salinas Pliego se manifiesta en contra de lo que percibe como una carga fiscal excesiva y una mala administración de los recursos públicos. Sin embargo, sus críticas llegan en un momento en que su propio grupo empresarial, Grupo Salinas, enfrenta serios cuestionamientos en torno al cumplimiento de sus obligaciones fiscales.
Un reportaje reciente de la revista Proceso señala que cinco empresas del conglomerado habrían dejado de pagar 76.3 millones de pesos en impuestos, aprovechando el programa federal Efideporte, que permite a las empresas destinar parte de su Impuesto Sobre la Renta (ISR) a proyectos deportivos de alto rendimiento.
Según el reportaje, en lugar de construir un Centro de Alto Rendimiento en Mazatlán, Sinaloa, como estaba previsto, los fondos fueron utilizados para construir canchas de fútbol para el Mazatlán FC, equipo propiedad de Salinas Pliego, lo que contravendría las reglas del programa.
Este presunto desvío de fondos podría resultar en sanciones graves para Grupo Salinas, ya que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) podría revocar el estímulo fiscal y exigir el pago de los impuestos originalmente adeudados. La situación se agrava al considerar que el proyecto fue aprobado por un comité interinstitucional en octubre de 2023, después de que supuestamente ya se habían iniciado las obras.
Además, Grupo Elektra, una de las empresas más grandes del conglomerado de Salinas Pliego, enfrenta un litigio con el Servicio de Administración Tributaria (SAT) por un crédito fiscal de 18,455 millones de pesos, relacionado con su salida del régimen de consolidación fiscal en 2013. Recientemente, la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, admitió a trámite un recurso de Elektra para impugnar este crédito, lo que ha sido interpretado como un respiro temporal para el empresario.
Por si fuera poco, Grupo Elektra fue retirado del Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) debido a la suspensión prolongada de la cotización de sus acciones, lo que representa un golpe significativo a su visibilidad y credibilidad en el mercado.
Este enfrentamiento entre Ricardo Salinas Pliego y el gobierno de AMLO refleja una tensa relación entre el sector privado y la administración pública en México, donde el cumplimiento fiscal y el uso de los recursos públicos son puntos de contención clave. Mientras el empresario continúa criticando la gestión gubernamental, sus propios conflictos fiscales sugieren un panorama complejo y lleno de controversias.
