Córdoba.- Para los recién nombrados dirigentes nacionales del Movimiento Familiar Cristiano (MFC) Rafael Vivían Hernández y Raquel Hernández Álvarez, uno de los mayores retos a los que se enfrentarán será el llegar a todas aquellas diócesis en las que se carece grupos que velen por el bienestar tanto de las familias como de los jóvenes.
Al existir 10 diócesis en todo el país que carecen de un MFC, ésta será la primera tarea del matrimonio que encabezará el movimiento durante los próximos tres años, con el objetivo de “conformar el reino de Dios en la Tierra”, enfocándose principalmente en aquellos estados afectados por los embates de la violencia.
El matrimonio, enfatizó en el hecho de que todos los objetivos trazados se encuentra acompañados de la intensa promoción de los valores humanos, sobre todo porque ante el deterioro de la sociedad éstos se han ido perdiendo.
Ambos dirigentes nacionales, coincidieron en el hecho de que el pensar que Dios se encuentra en segundo término ha sido un factor determinante para la desintegración de las familias, por lo cual su rescate será primordial.
Finalmente señalaron que esperan que al término de su gestión contar con presencia en 92 diócesis de todo el territorio mexicano, así como en el extranjero mediante programas de migrantes logrando atender a cerca de 48 mil familias, 13 mil jóvenes a quienes se dará testimonio del amor de Dios, para apoyar a todos aquellos que se encuentran alejados de su palabra.
Yessica Martinez
El Buen Tono
