CÓRDOBA.- Entre el dolor y la impotencia, familiares de los jóvenes que fueron abatidos la tarde de ayer en la comunidad de Amatlán, continúan bloqueando los principales accesos para que de está manera sean escuchados por las autoridades quienes hasta el momento no han dado solución al trágico suceso. Entre el llanto y la desesperación, las madres de los menores aseguran que Eduardo y Jonathan laboraban en la vivienda de su tío como desde hace un año lo han venido haciendo y de está manera ayudaban con los gastos de la casa y costeaban uno que otro gasto personal.
“Por 10 o 15 pesos te lavaban tu carro, barrían los patios o hacían mandados, tenían un montón de sueños pero lo último que les dio felicidad, fue haber recibido su boleta de calificaciones; querían incluso estudiar la prepa abierta para poder trabajar durante la semana y ayudarnos, porque como usted ve, somos gente humilde, cómo pueden pensar que ellos eran delincuentes, si eran unos niños ejemplares”, expresó una de las madres de los finados.
La pequeña vivienda construida con madera y techo de láminas de cartón, resguarda las ataúdes color blanco donde ahora descansan los restos de los niños que serán sepultados mañana domingo, hoy nuevamente volverán a velarlos. Los manifestantes tomarán la caseta de Fortín en respuesta al nulo eco que ha hecho su protesta, pues aseguran que algunos medios de comunicación han tergiversado la realidad y buscan obtener de atención del Gobernador del estado de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez.