AGENCIA
EEUU.- El intento de Jim Jordan, un republicano conservador de línea dura, por convertirse en el presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos llegó a su fin el viernes, cuando sus colegas de partido retiraron su apoyo después de una tercera votación fallida en el pleno de la Cámara, según informaron los legisladores.
Esta decisión tiene un impacto significativo, ya que la Cámara se quedará sin líder y no podrá atender la solicitud del presidente Joe Biden de ayuda para Ucrania e Israel hasta la próxima semana, como muy pronto.
A lo largo de la semana, la oposición a la candidatura de Jim Jordan desde dentro de su partido fue en aumento. En una tercera ronda de votación el viernes, unos 25 congresistas republicanos votaron en su contra, superando los 22 votos en contra en la segunda ronda del miércoles. Jordan recibió solo 194 votos, muy por debajo de los 214 necesarios para ganar la presidencia. Como resultado, los republicanos votaron a favor de revocar su nominación en una reunión a puerta cerrada.
La Cámara de Representantes se encuentra en su tercera semana sin presidente, lo que impide que se pronuncie sobre un importante paquete de seguridad nacional por valor de 105 mil millones de dólares presentado por el presidente Biden el viernes. Este paquete tiene como objetivo reforzar la seguridad fronteriza de Estados Unidos y proporcionar asistencia financiera a Israel y Ucrania.
El representante republicano Greg Murphy comentó sobre la situación, señalando: “Jim es un buen hombre. Pero ya sabes, cuando los votos no están ahí, los votos no están ahí”.
Jim Jordan, conocido como un aliado cercano de Donald Trump, desempeñó un papel destacado en los intentos del expresidente por anular la victoria de Biden en las elecciones de 2020, según una investigación del Congreso. Jordan expresó su creencia en problemas relacionados con las elecciones de 2020 antes de la votación.
La estrecha mayoría republicana en la Cámara no ha logrado unirse en torno a Jordan ni a ningún otro candidato para sustituir al presidente de la Cámara, Kevin McCarthy, destituido por un grupo de miembros del partido el 3 de octubre. Tampoco han podido acordar un plan alternativo para que la Cámara retome sus tareas legislativas.
A pesar de que los republicanos controlan la Cámara por una estrecha mayoría de 221-212, algunos miembros estuvieron ausentes en la votación del viernes. El total de votos obtenidos por Jordan fue inferior a los obtenidos por McCarthy en las 15 rondas de votación celebradas en enero.
La postura inquebrantable de Jordan parece haber desempeñado en su contra, con algunos republicanos indignados por las llamadas de acoso y las amenazas de muerte. No obstante, los aliados de Jordan argumentan que estas amenazas son comunes en el Congreso.
Los demócratas, por su parte, han votado unánimemente en contra de Jordan, describiéndolo como un extremista peligroso. No está claro si los republicanos podrán unirse detrás de otros posibles candidatos, y ya se mencionan varios nombres como alternativas.
Además, los republicanos también están divididos en torno a una alternativa que permitiría a la Cámara abordar el paquete de ayuda de Biden y otros asuntos urgentes. Este plan otorgaría más autoridad temporal al republicano Patrick McHenry, quien actualmente ocupa la presidencia de la Cámara. Los demócratas y la Casa Blanca han expresado su disposición a considerar esta alternativa, aunque los republicanos la rechazaron previamente.
Esta situación en el Capitolio también está afectando a la volatilidad de los mercados, según inversores.
Jim Jordan se ha destacado como un líder de línea dura en el flanco conservador. Sus partidarios argumentan que esto lo convertiría en un defensor eficaz de las políticas conservadoras. Jordan estuvo involucrado en los cierres del gobierno en 2013 y 2018, y contribuyó a la jubilación del presidente republicano John Boehner en 2015.