Córdoba.- Hoy lunes regresará a trabajar la candidata perdedora, la Sahagún, luego de más de 100 días de haber dejado su cargo para hacer campaña política, y quince días después de que se le venciera el permiso que le dio el Ayuntamiento.
Y es que el oficio del 3 de marzo de este año, del director de Recursos Humanos, era muy claro: le aceptaron y autorizaron la solicitud de permiso, “debiendo incorporarse a las labores que venía desempeñando el día 16 de junio del presente”. Tan poco interés tiene esta “política” por Córdoba y los cordobeses, que indebidamente se tomó dos semanas más para vacacionar, luego de haber sido derrotada por la mayoría de los electores.
Si su labor en la presidencia municipal fuera de intendencia o de veladora, con respeto a quienes desempeñan estas responsabilidades, tal vez no tendría ningún problema Córdoba en que no regresara a laborar, pero como directora de Desarrollo Social, en donde se tiene la obligación de velar por los cordobeses en pobreza extrema, la irresponsabilidad que muestra esta “funcionaria pública” es también extrema.
Como si el hambre de los cordobeses en pobreza extrema pudiera esperar a que esta “servidora” termine de descansar, o en plena temporada de lluvias, tengan que esperar a que regrese esta empleada irresponsable a resolverles el tema de los que ni techo tienen, para poder dormir aislados del agua. Pero en fin, este es el PAN de Tomás@elalcahuetedePortillayLavín.
Lo cierto es que la campaña terminó en los primeros días de junio, y desde entonces anda vacacionando. Su regreso se da, también es cierto, como premio de consolación a todos los actos de corrupción que hizo y que permitió que se hicieran durante su campaña, como el hecho de que a los funcionarios y empleados de presidencia municipal se les quitara, bajo el esquema de un “préstamo”, un mes completo de salario que se destinó a su campaña, ilegalidad a la que se sumaron el propio Alcalde, el Secretario del Ayuntamiento, algunos regidores y el Diputado Local, y en el que participó también la contralora municipal, quien en lugar de frenar o detener esta irregularidad, la solapó y se coludió con ellos.
Tan sólo esas aportaciones económicas forzosas a su campaña, fueron suficientes para que se sobrepasaran los topes de gasto para la campaña política en la elección de Diputado Local. ¿Qué más hicieron? Perder la elección, y tras ello, irse de vacaciones, pagadas todavía con el dinero que le quitaron a los empleados municipales, que hoy lunes, cuando la vean de regreso, le estarán reclamando a esta “servidora” de los cordobeses, que lleva décadas enchufada a la ubre municipal, sin ningún resultado positivo para la ciudad, el municipio y sus habitantes.
Si no necesita trabajar, como ya demostró en estas últimas semanas, es porque tiene mucho dinero. Mejor debería Tomás@elalcahuetedePortillayLavín dar oportunidad a muchos jóvenes desempleados, con preparación y voluntad de servicio, que no encuentran dónde desarrollarse profesionalmente.
