AGENCIA
Tabasco.- A seis años de su anuncio por el presidente Andrés Manuel López Obrador, la refinería de Dos Bocas en Tabasco aún no produce gasolina ni opera por completo. Pese a la instalación de cientos de kilómetros de tuberías, tanques, turbinas y equipos especializados, la planta carece de un ducto de gas natural crucial para su funcionamiento.
En junio de 2023, Rocío Nahle, entonces secretaria de Energía, afirmó que el ducto de gas natural estaba terminado y que la refinería ya contaba con energía. No obstante, trabajadores y especialistas en materia energética consultados por Latinus contradicen estas declaraciones, señalando que el ducto no está finalizado, retrasando así la producción de gasolinas.
La construcción de la refinería, que ha implicado una inversión de 17 mil millones de dólares, ha estado marcada por promesas incumplidas y retrasos. El gasoducto, una de las arterias centrales para obtener energía y operar la refinería, sigue sin completarse, evidenciando problemas significativos en la ejecución del proyecto.
La refinería de Dos Bocas, una de las principales obras de infraestructura del gobierno de López Obrador, sigue siendo una promesa pendiente, con el país aun esperando que comience a producir combustibles.
En la reconfiguración de Cadereyta se incluía un ducto de muchos kilómetros, se decía que ya tenía un 99 por ciento (%) de avance.
¿Se pueden imaginar un ducto de alta presión con esa curvatura? Una buena fuente de información certera podría ser el ICF-UNAM.
