Córdoba.- A pesar de que elementos de la Policía Federal aseguraran una disminución en los índices delictivos en los principales tramos carreteros del país en lo que respecta a la autopista México-Puebla y el área metropolitana del Estado de México continúan siendo zonas peligrosas debido al alto número de robos de tractocamiones y mercancía, aseguró el delegado de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar) en la zona Córdoba-Orizaba, Ramón Trujillo Nieto.
Reconoció que en la entidad la situación es menos crítica que en años anteriores, toda vez que en Veracruz ha disminuido bastante la inseguridad en las carreteras sin embargo, aún existen zonas conflictivas en donde se presentan con mayor frecuencia los robos e ilícitos como lo es en el estado de Puebla y la Ciudad de México.
Señaló que una vez pasando que se sale del territorio carretero estatal empiezan los problemas, dando como resultado las pérdidas millonarias para el sector de los transportistas derivados del robo completo de sus camiones y de la mercancía.
“En Puebla y Estado de México, hemos tenido más reportes, por eso hemos buscado acercamientos con la Policía Federal lo que nos ha permitido disminuir los asaltos a los transportistas al menos en la zona Córdoba-Orizaba”, agregó.
Como medida de seguridad Trujillo Nieto, indicó que las empresas transportistas han comenzado a realizar protocolos de seguridad para evitar ser víctimas de los asaltos, aunque esto representa inversiones cuantiosas, los insumos y materiales robados son mucho más valiosos, por ello no importa lo que se haga para resguardar sus ingresos.
En otro orden de ideas, indicó que para la zona Córdoba-Orizaba los transportistas entraran en un proyecto generado por el Gobierno federal de descacharrización para los autotransportes de carga que tengan más de 20 años de antigüedad, por lo que se prevé que sean por lo menos 75 mil camiones de carga eliminados.
Destacó que a pesar de que aún no hay fecha exacta para el arranque de ese programa se encuentran en las últimas platicas con la Federación para que sea haga lo más pronto posible ya que hay un alto número de autos de carga muy viejos y que deben de ser reemplazados por nuevos.
Para apoyar a los transportistas el gobierno federal tomará en cuenta el camión desechado, solventado parte del costo de la unidad nueva el cual oscila entre el millón 400 mil pesos, además de que se buscará contar con el apoyo de empresas para solicitar facilidades de pago dando hasta siete años de crédito.
“Sabemos que entraremos en una etapa de endeudamiento pero es necesario hacer esta descacharrización porque andan circulando camiones de más de 20 años de antigüedad que son un peligro para la ciudadanía ya que son generadores de accidentes”, finalizó.
Yessica Martínez Argüelles
El Buen Tono