Sandra González T.
Juan José Enríquez
el buen tono
Orizaba.- Una oleada de inseguridad que ha incluido cuerpos arrojados a la vía pública, secuestros y ejecuciones en situaciones no aclaradas, ha detonado la preocupación de sectores económicos, religiosos y de trabajadores.
Ayer, el vocero de la Diócesis de Orizaba, Helkyn Enríquez Báez, dijo que la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) tiene que reconocer que hay un problema de inseguridad en la zona centro para poder realizar una estrategia adecuada.
Esto, como reacción a la declaración del titular de la SSP, Hugo Guitiérrez Maldonado, al rechazar que la región sea considerada como un foco rojo en materia de inseguridad, pese a los cuatro abatidos sobre la carretera federal 150 Orizaba-Tehuacán y la privación ilegal de la libertad de una persona en el municipio de Magdalena.
Helkyn Enríquez agregó que hay un deseo ferviente para que nuestras comunidades vivan en paz, que no hubiera la necesidad como lo vimos en la región de Acultzingo, de que los ciudadanos clamen por seguridad ante los hechos de violencia que registran y como esa comunidad, otras.
Por separado, el asesor del Grupo Regional Independiente de Taxistas Orizaba, Jairo Guarneros Sosa, lamentó que a Gutiérrez Maldonado se le haya olvidado que los ruleteros le han dicho el grave problema de inseguridad que vive la zona.
Desde que asumió el cargo se le hizo saber de la situación de inseguridad que vive el gremio taxista y la inquietud que esto les provoca, dijo.
Recordó que al reunirse con él se le dijo cómo estaba la situación en la región centro, pese a que fueron convocados solo a una sesión y en esa “no se avanzó en nada”.
