Atoyac.- Sin energía eléctrica y sin teléfono, recibió el edificio municipal Agustín Mollinedo Hernández, de parte de su hermano, el alcalde saliente, Marcos Mollinedo, quien confió que la deuda asciende a poco más de 200 mil pesos, por lo que se aplicó un plan emergente para evitar que las colonias se quedaran sin agua y sin el servicio de recolección de basura. Además de 10 laudos laborales millonarios que dejó como herencia Fernando Pimentel Ugarte.
“Efectivamente la CFE nos cortó la luz después del día 30, porque no había dinero para pagar, eso se debe a que el Estado nunca nos depositó el apoyo de la bursatilización, con eso tendríamos a bien cubrir las últimas deudas, así que al no hacerlo nos afectaron”, expresó el Alcalde saliente.
En tanto Agustín Mollinedo aseguró que fue necesario atender con un plan emergente la situación, así como evitar que los vecinos se quedaran sin agua, ante el cierre de las bombas que suministran las diversas colonias de esta localidad.
Y es que hasta donde se conoció, el palacio municipal se quedó sin luz y sin teléfono, debido a que no se pagaron a tiempo los recibos, la deuda asciende a poco más de 200 mil pesos, además quedaron deudas por el concepto de laudos laborales, que corresponden a la administración de Fernando Pimentel Ugarte.
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