Orizaba.- Siete de cada diez personas de preferencia sexual igualitaria son rechazados por sus padres de familia, quienes incluso los corren de su casa, señaló la directora del Colectivo Feminista Cihuatláhctolli, María de la Cruz Jaimes García.
A consecuencia de este rechazo, muchos ven en la prostitución una salida a sus problemas económicos, pues se habla de jovencitos entre los 14 y 17 años, y que en el momento de hablarlo con su familia lo que obtienen es un rechazo rotundo, por lo que incluso algunos llegan hasta el suicidio.
Dijo que se trata de un problema bastante grave en la población, “porque no hay una educación sexual en las instituciones educativas como tendría que ser para las madres y padres de familia, porque no hay elementos en la sociedad para entender cuando una persona es diferente”.
Debido a que los padres de familia no los aceptan, los “han echado de sus casas, los discriminan, los violentan, los maltratan, incluso hay mucha gente que reprime su orientación sexual y por eso son gentes que llegan incluso a casarse, a formar familias y lo que sucede es que tiene que vivir una doble vida”. Con ello, consideró que se debe de educar y orientar a las familias en la aceptación de la diferencia, en respetar los derechos humanos.
“La familia tiene que entender que no es un capricho, porque aunque nazcan con genitales femeninos o masculinos, dentro de ese cuerpo está otra persona, un hombre o una mujer, dependiendo la orientación sexual, contraria a sus genitales, es una identidad que no se puede cambiar”, concluyó.