Ixhuatlán del Café.- Una vez más el maltrato a los toros se promovió y convirtió en una diversión para los asistentes a la “novillada”, que se realizó en la avenida principal del municipio, dentro de las festividades al Santo Patrono.
Como en su mayor parte de los eventos, la impuntualidad caracterizó la mala organización del comité, evento que estaba programado para el medio día y fue hasta las 13:00 horas que comenzó, ante la gente que poco a poco salía a las azoteas y gradas instaladas para presenciar los actos.
Seis novillos traídos del Estado de Guerrero y Tlaxcala, como celebridad que se realiza en el municipio de Xico, se hicieron presente en la “fiesta” del Santo Patrono del Ixhuatlán.
Uno a uno, fueron bajando de una camioneta de tres toneladas para que los hombres, desde niños hasta adultos mayores, con sombreros, paliacates y gorras torearan a los becerros que en ocasiones fueron agredidos.
Los accidentes no pudieron faltar, varios hombres fueron embestidos por las vaquillas y uno resultó herido en la mano al caer y cortarse con el vidrio de un envase.
Fueron más de tres horas de diversión para los presentes, y tal vez cansancio y dolor para los semovientes que corrían sin saber qué es lo que pasaba, sólo con el fin de promover una actividad ilícita.
Además, el festejo en Ixhuatlán viola la legislación en Veracruz que prohíbe el maltrato hacia los animales y contraviene el sentir de la opinión pública, la que se han unido diversas ganaderías para evitar la venta de estos ejemplares para dichos actos de maltrato.
Los municipios de Tlacotalpan y Xico continúan siendo considerados como “focos rojos” en cuestión de maltrato animal, pues durante sus fiestas patronales realizan actividades como inmersión de toros y semovientes, o los sueltan por las principales calles donde son agredidos por habitantes y visitantes y finalmente mueren ahogados.
