Especialista en finales, el estreno del palmarés de Santiago Solari como técnico llegó con susto inicial y posterior demostración de poderío. Repetía el once que ha dado la estabilidad buscada en el torneo y Marcos Llorente respondía con una acción repleta de potencia que culminaba con un pase atrás que acababa en el poste. El remate de Lucas lo sacaba Fayez y la madera impedía el primero.
Al Ain no fue rival para el Real Madrid que plasmó la abismal diferencia del fútbol entre continentes. El examen verdadero habría sido River Plate, pero la final soñada no se dio y el dominador del fútbol mundial en tres años de indiscutible hegemonía, dio un baño de experiencia a un rival inexperto en esas lares.