Juan José Enríquez
El Buen Tono
RÍO BLANCO.- Comerciantes de la periferia del Hospital Regional de Río Blanco (HRRB) pidieron al alcalde Ricardo García Pérez, que no quite las casetas donde venden sus productos, pues de ahí dependen familias que llevan el sustento diario a sus hogares.
Jacqueline Cisneros Sánchez, expuso que lamentablemente detrás del supuesto reordenamiento existen intereses particulares para beneficiar a una familia en especial, que pregona tener todo el apoyo del alcalde Ricardo Pérez García por ser su pariente.
Se trata de Hugo García Toscano y Tania Guzmán Cisneros, quienes han dicho que sus lazos familiares con el edil pesan más que cualquier amparo para evitar ser reubicados.
Es por eso que los afectados en voz de Jacqueline Cisneros solicitaron al alcalde que piense correctamente en sus decisiones y no afecte a las personas que se ganan la vida de manera honesta.
Mencionó, de la misma manera, que
compraron una caseta para ofrecer alimentos de calidad e higiene a los comensales, en especial a las familias de los pacientes que están internados en el HRRB.
Comentó que debido a que la autoridad de Salud ordenó cerrar el comedor de la Aopac, muchas personas no tienen dónde comprar algo para comer y si les llegan a quitar ese espacio, quedarían a la intemperie y estarían expuestos al sol y los alimentos se
contaminarían.
Comentó que actualmente tiene 52 años de edad, pero llegó a ese lugar a vender desde que era una niña, y ahora les dicen que tiene que quitar su
caseta.
Mencionó que acudió a buscar al director de Comercio, pero este no ha querido atenderla, es por eso que promovió un amparo para que no la reubiquen.
“Todos tenemos necesidad, todos tenemos hambre. Yo soy discapacitada porque no tengo un riñón y soy diabética, pero no pido nada por mi discapacidad, no quiero que me den una despensa o un apoyo, yo solo quiero que me dejen trabajar”.
