Río Blanco.- El fomento a la lectura en espacios públicos parece no ser una prioridad para el Ayuntamiento, pues a casi tres meses de que retiraron el Paralibros del Conaculta de la Alameda Central, no ha sido reinstalado para el uso de más de 500 lectores que acudían a la estructura a solicitar el préstamo
de libros.
La estructura metálica parecida a una parada de autobús, que contenía aproximadamente 320 libros de diversos géneros, entre ellos revistas, diccionarios y enciclopedias de consulta gratuita fue instalado en febrero de 2013 y retirado el 14 de diciembre de 2015 para liberar espacio y así ubicar los stands de la Feria Navideña organizada por las autoridades locales.
A decir del presidente de la asociación civil “Porque nuestro proyecto es Río Blanco”, Joaquín Alberto Amaro Rodríguez es incongruente que siendo la alcaldesa Ángeles Martínez Martínez una docente, sea indiferente a un proyecto que incentiva a la población a adoptar el gusto por la lectura, además en un espacio público y sin estorbar a los transeúntes.
“El motivo por el cual el Ayuntamiento solicitó el retiro del Paralibros a Conaculta fue porque tenían un evento de una feria navideña y estorbaba, pero la sorpresa fue que le dieron ese espacio a una agencia de autos que se plantó ahí con sus carros. El Paralibros era totalmente funcional en la alameda para el fomento a la lectura y es incongruente que se haya quitado por esos motivos”, expresó.
A su percepción, aseguró que el Paralibros tenía un alcance de atención a cerca de 500 habitantes entre ellos estudiantes y personas adultas que acudían con el encargado a solicitar libros que leían al aire libre y en sus domicilios. Con su retiro, lamentó que los más afectados son esta población que ya no cuentan con este servicio que en nada perjudicaba las actividades del
Ayuntamiento.