AGENCIA
Moscú, Rusia.- El presidente ruso, Vladímir Putin, ofreció diálogo a Occidente en materia de seguridad y estabilidad estratégica, aunque defendió la creación de un nuevo orden mundial, durante la ceremonia de investidura para su quinto mandato al frente del Kremlin. El acto tuvo lugar en el Gran Palacio del Kremlin, donde Putin juró el cargo con la mano derecha sobre un ejemplar de la Constitución rusa.
“Nosotros no rechazamos el diálogo con los países occidentales. Depende de ellos”, afirmó Putin tras su toma de posesión, planteando una interrogante sobre las intenciones de Occidente hacia Rusia: “¿Tienen intención de seguir intentando frenar el desarrollo de Rusia, proseguir la política de agresión y la presión que no ha cesado durante años sobre nuestro país, o buscar vías de cooperación y paz?”.
El presidente ruso destacó que el diálogo con Occidente en temas de seguridad y estabilidad estratégica es “posible”, pero señaló que no debe basarse en una posición de fuerza, sino en igualdad de condiciones y respeto mutuo. “Sin arrogancia, prepotencia ni exclusividad personal, y sólo en igualdad de condiciones, respetando los intereses de cada uno”, subrayó.
Putin también habló de la formación de un mundo multipolar y un sistema de seguridad equitativo e indivisible, enfatizando la importancia de que Rusia sea autosuficiente y competitiva, y que el sistema sociopolítico sea robusto ante cualquier desafío. Durante su discurso, recordó a los “héroes” de la campaña militar en Ucrania y afirmó que la seguridad del pueblo ruso es una prioridad para él.
En medio de la ceremonia de investidura, Putin ordenó al Ejército realizar maniobras con armas nucleares tácticas en el Distrito Militar Sur, que incluye a los territorios ucranianos anexionados por Moscú, en respuesta a las “provocaciones” y “amenazas” occidentales. Asimismo, el gobierno ruso citó a los embajadores de Francia y el Reino Unido por declaraciones sobre el posible despliegue de tropas de la OTAN en Ucrania y el derecho de Kiev a atacar objetivos en territorio ruso con armamento occidental.
Este quinto mandato de Putin llega en un contexto internacional marcado por tensiones con Occidente, especialmente tras la invasión de Rusia a Ucrania y las sanciones impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea. El discurso del presidente ruso muestra una aparente apertura al diálogo, pero también deja clara la intención de seguir defendiendo los intereses rusos y manteniendo una postura firme frente a cualquier amenaza externa.
Con esta investidura, Putin continuará al frente del Kremlin, con un ojo puesto en la situación en Ucrania y el otro en las crecientes tensiones con Occidente, prometiendo seguridad y estabilidad para Rusia mientras avanza hacia un nuevo orden mundial multipolar.