El presidente ruso, Vladimir Putin, ha advertido sobre las posibles consecuencias de una ofensiva israelí en la Franja de Gaza. Israel ha dado un ultimátum a Gaza para que se evacúen más de 1,1 millones de palestinos de la zona norte de la Franja en 24 horas, lo que podría indicar el inicio de una ofensiva israelí. Putin considera que una operación terrestre en Gaza sería “absolutamente inaceptable” debido a la alta densidad de población en la región. Ha instado a Israel a evitar el uso de armamento pesado en áreas residenciales.
Putin también abogó por la solución de dos Estados, con una Palestina independiente y Jerusalén Este como su capital, como la única salida al conflicto. Se ofreció como mediador para buscar un alto el fuego y culpó a Estados Unidos de la actual escalada de violencia en la región, alegando que es el resultado de la política fallida de Estados Unidos en Oriente Próximo. El presidente ruso espera utilizar sus relaciones diplomáticas con Israel y Palestina para buscar una solución al conflicto.
Putin hizo estas declaraciones durante una reunión de la Comunidad de Estados Independientes en Kirguistán, calificando la situación actual de “enorme tragedia” tanto para palestinos como para israelíes. Atribuyó la crisis actual a la política de Estados Unidos en Oriente Próximo, que no ha tenido en cuenta los intereses fundamentales del pueblo palestino.