Nogales.- Entre 40 y 50 negocios familiares cerraron sus puertas en Huiloapan y este municipio, como consecuencia del desempleo que existe en la región desde hace 22 años, informaron los integrantes de la organización en pro de la defensa de los ex trabajadores de San Lorenzo y Mirafuentes, Rogelio Sánchez Paniagua y Horacio López.
Consideraron que los alcaldes, Antonio Bonilla Arriaga, de Nogales, y Luis Francisco Soto Palacios, de Huiloapan, no hacen nada para atraer inversiones que permitan la recuperación de la economía.
Indicaron que durante el primer semestre del año, el sector comercial tocó fondo, en tanto que el obrero lleva más de dos décadas en problemas, que iniciaron con el cierre de las fábricas textiles, como San Lorenzo y CIVSA.
Puntualizaron que lo alarmante de la situación son las plazas que se perdieron y que ya nunca se recuperaron, “vemos como pasan gobiernos municipales y ninguno hace nada por atraer nuevos capitales a la región”.
Refirieron que el máximo histórico se registró en la década de los 80, cuando hubo más de mil contrataciones de trabajadores, según consta en las altas ante el
Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), “prestaban sus servicios en Sivesa y en las factorías textiles, tenían buenos salarios”.
Mencionaron que a partir de 1990, el panorama cambió, la situación económica nacional afectó a la industria local, que comenzó su descenso y acabó por desplomarse con los efectos negativos que ya todos conocen.
Destacaron que la falta de empleo y por ende de circulante, genera que las familias sólo compren lo necesario y eso hizo que muchos negocios cerraran sus puertas.
