Agencias
Región.- Hace una década, México producía más de 8 millones de sacos de café anuales, pero hoy esa cifra se ha reducido a la mitad. Francisco Ferrer, presidente del Consejo Regional Cafetalero en Córdoba, atribuye esta caída principalmente al cambio climático, que ha impactado gravemente el sector cafetalero con una combinación peligrosa de sequías extremas seguidas de lluvias torrenciales. Estas condiciones han deteriorado los cultivos, afectando a uno de los sectores económicos más relevantes del país.
Para revertir esta tendencia, Ferrer subraya la necesidad de un esfuerzo conjunto entre los caficultores y el gobierno, y en particular del apoyo de técnicos especializados en agricultura. Sin embargo, en medio de esta crisis surge una señal de optimismo: los precios del café en el mercado internacional han superado los 260 dólares por quintal, lo que podría traducirse en un precio superior a los 16 pesos por kilo para el café cereza al inicio de la cosecha a finales de octubre.
Este incremento en los precios genera esperanza entre los productores, quienes confían en que la estabilidad de estos valores les permitirá invertir en la renovación de los cafetales e impulsar un aumento en la producción para el próximo ciclo.