Amatlán.- Autoridades municipales han presumido por todo lo alto la Feria de la Cruz y el Rosario sobre todo con el lujoso cartel de artistas para deleite de los ciudadanos; sin embargo la realidad ha sido otra. Y es que a pesar de la publicidad, la inseguridad que se vive en Amatlán es el pan de cada día, ya que dos vehículos fueron robados y uno de ellos a una cuadra del Palacio. El alcalde Luis Arturo Figueroa señaló que el 3 de mayo sería el día grande y de más afluencia a pesar de no contar con las medidas sanitarias ni la vigilancia para salvaguardar la vida de los visitantes. Las controversias surgieron desde la planeación, ya que los costos para la renta de piso estaban elevados, así como las quejas de los vecinos del
primer cuadro.
