Cancún.- El anuncio de la construcción de un gran complejo de negocios y habitacional con capital chino, tiene preocupados a ciudadanos, ambientalistas y empresarios del municipio Benito Juárez, con cabecera en Cancún, Quintana Roo.
“Se está haciendo en un lugar en donde no era posible ese tipo de desarrollos, violando el plan de ordenamiento ecológico. Sin ningún permiso devastaron la selva son cerca de 200 hectáreas aunque compraron 500 hectáreas”, dijo Ricardo Lujambio, Presidente Asociación Fundadores de Cancún.