Leyendo que los mejores presidentes priistas que ha tenido nuestro país: Alemán, Ruiz Cortines, López Mateos y Díaz Ordaz, tuvieron situaciones muy parecidas a las que están sucediendo ahora, me pareció oportuno relatarlos, para los que no lo vivieron.
Cuentan que el sindicato de la recién creada Pemex se sintió con fuerza suficiente como para poner en jaque al gobierno de Miguel Alemán, y después de los primeros movimientos tácticos, por fin le declararon la huelga. Entonces, el presidente mandó poner soldados en los despachadores de gasolina y en las gasolineras para manejar el transporte.
La huelga nunca estalló, pues se sintieron perdidos. Días después, invitaron al presidente a un desayuno para limar asperezas, y durante el convivió, alguien dijo: “si solo estábamos calándolo, señor Presidente”. Alemán contesto: “Pues ya me calaron, hijos de la ch…”
Otro caso muy sonado fue cuando López Mateos iniciaba su periodo presidencial, con Díaz Ordaz como secretario de Gobernación, pues se pusieron en huelga los sindicato del IMSS y de los ferrocarrileros.
Entonces entre los dos mandatarios, urdieron crear un delito al que llamaron DISOLUCIÓN SOCIAL, y ya aprobado por la Cámara de Diputados, mandaron a la cárcel a ambos líderes, aplacándose el movimiento de inmediato.
Hubo un tercer caso, protagonizado por el secretario de Gobernación en el selenio de Díaz Ordaz, Luis Echeverría, de quien cuentan que en ese entonces era miembro de la CIA americana, desde donde le ordenaron parar el movimiento estudiantil del 68, pues estaba infiltrado por el comunismo cubano.
La solución fue brutal, ya que dio origen a la matanza de estudiantes de 1968.
Ya siendo presidente, atacó nuevamente a los estudiantes que iniciaban una manifestación, enviándoles a los famosos “halcones”, quienes disiparon a palos dicha manifestación.
Ahora el asunto suena más complejo, ya que una parte minoritaria de los maestros del país, que forman algo que le llaman la Controladora, tiene inundada la ciudad de México, ocupando las principales avenidas con el consiguiente daño a la población, pues ocupan Reforma, Insurgentes, las calles del Congreso y otras. Invadieron la Cámara de Diputados, intentaron tomar el aeropuerto de la Ciudad de México y otra serie de barbaridades más, y además amenazan con seguir violando la ley sin que ninguna autoridad haga nada.
El Jefe de Gobierno del DF sólo habla de diálogos. La Cámara de Diputados aceptó posponer la discusión de un punto de la ley complementaria porque no les gustó a los huelguistas, sentando un precedente peligroso, ya que faltan muchas leyes por discutir de las reformas que vienen.
No creo que la forma en que estos pelafustanes están manejando su inconformidad sea la más adecuada, si quieren que se les llame “maestros”. Contra la fuerza, el Gobierno debe usar la fuerza, y no aceptar absolutamente nada de lo que estén pidiendo.
Mientras los niños de los estados sureños están sufriendo por falta de clases, sus dique maestros hacen lujo de violencia en la ciudad de México. Total, están ganando su sueldo.
En el sector empresarial, el patrón suspende los salarios inmediatamente que los trabajadores abandonan su trabajo. Paga salarios caídos si pierde la huelga, pero si gana, los trabajadores regresan a sus puestos sin haber recibido nada.
No concibo que dentro del recinto parlamentario, un sujeto se haya atrevido a amenazar al gobierno si no cede a sus peticiones, y mi opinión ante tanta insolencia, es que dejemos de hablar de diálogos y actuemos con la ley en la mano. Después de ver cómo destrozaron un coche a palos y entraron por la fuerza al recinto Parlamentario, me resisto a llamarlos “profesores”, ya que puede decirse de ellos que son delincuentes comunes, que no merecen llamarlos al diálogo, pues por esa vía no vamos a conseguir nada.
No sé por qué la tibieza de nuestros funcionarios, comenzando con el C. Presidente de la Republica y siguiendo con las demás autoridades del país. Hablar de diálogos y no de cumplir la ley no debe ser la posición correcta.
¿Será otro PRI que busca su pedazo del pastel?
¿Serán los gobernadores endeudados buscando ayuda?
¿Serán los ex gobernadores que se quedaron sin sueldo?
No se sabe todavía, pero alguien o “álguienes” están pagando este movimiento. Mover treinta mil sujetos cuesta mucho dinero. Alguien paga. ¿Quién será?