Desde junio, los astronautas Butch Wilmore y Suni Williams han estado varados en la Estación Espacial Internacional (EEI) debido a problemas con la nave Starliner de Boeing. En un giro inesperado, la NASA ha confirmado que su regreso a la Tierra no ocurrirá hasta al menos fin de marzo de 2025, lo que extenderá su estancia en el espacio a más de nueve meses, cuando originalmente se planeaba una misión de solo ocho días.
El retraso se debe a la decisión de la NASA de aplazar el lanzamiento de la misión Crew-10, que estaba prevista para febrero de 2025. Este retraso permitirá a los equipos de la NASA y SpaceX completar el desarrollo de una nueva nave espacial Dragon. La misión Crew-10, que debería haber relevado a la misión Crew-9 de SpaceX, será la encargada de traer de regreso a Wilmore y Williams.
El inconveniente surgió cuando durante el verano se realizaron pruebas del Starliner y se determinó que debía regresar a la Tierra sin tripulantes, dejando a los astronautas aún más tiempo en el espacio.
Ahora, los dos astronautas deben esperar más de lo planeado para regresar a su hogar, enfrentando una experiencia que podría ser histórica, pues su misión de prueba a bordo del Starliner ha estado llena de retos imprevistos. Sin embargo, su paciencia y compromiso siguen siendo clave para la investigación espacial y las futuras misiones de la NASA.
Aunque la espera será larga, Wilmore y Williams continúan en buenas condiciones, y se espera que puedan regresar a la Tierra con todo el conocimiento adquirido durante su prolongada estancia en el espacio.