Mariana Gutiérrez H.
el buen tono
Río Blanco.- Habitantes del municipio, principalmente de la colonia Modelo denunciaron que en los últimos días elementos de la Policía Estatal emprendieron una persecución contra los migrantes que transitan por las vías del ferrocarril o en las calles, pero nadie detiene a los “polleros” o integrantes de bandas que se dedican a explotarlos.
Confirmaron que desde abril el paso de indocumentados se incrementó considerablemente, incluso se observa a familias arriba de vagones o caminando por arterias aledañas.
Sin embargo, de manera anónima denunciaron que cada vez hay más presencia de elementos de la Policía Estatal que prácticamente están en espera de las personas que viajan en el ferrocarril o desciende, para buscar comida o que los ayuden con dinero.
“Desde hace más de un mes notamos una mayor presencia de los elementos de Seguridad del Estado, pero no de personal de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, para que inspeccione la detención y los operativos que se realizan para detenerlos”, expresaron los entrevistados.
Dijeron que “es triste escuchar por las noches cómo piden ayuda, pero los ignoramos y más cuando gritan que vienen siendo perseguidos por células delictivas, ahí es cuando los policías deberían ayudarlos”.
Sin embargo, los vecinos del lugar comentaron que aun cuando les duele, nada pueden hacer por ellos, porque saben que al salir de sus viviendas desconocen a qué se van a enfrentar, y a pesar de que solicitan la presencia de la Guardia Nacional, porque desconfían de la Policía Estatal, su presencia es nula, por lo que los migrantes quedan en la indefensión y desamparo.
Realidad
La situación con los migrantes se da por la impunidad, no les hacen nada a los traficantes o delincuentes, porque están coludidos con las autoridades, manifestó un activista de Derechos Humanos.
Añadió que es importante destacar que la situación es un problema que afecta a muchos países del mundo, en los que los indocumentados que transitan por las vías del ferrocarril son víctimas de diversas formas de violencia, explotación y abuso.
Habitantes y organizaciones denuncian la falta de acciones efectivas por parte de las autoridades para protegerlos y perseguir a los responsables de tales prácticas.