Agencias
México.- El próximo gobierno de México deberá asumir un costo de más de dos billones de pesos para mejorar el sistema energético del país, según estimaciones del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP). Este costo fiscal, equivalente a 2 billones 195 mil millones de pesos, es necesario si se continúa con la política energética del presidente Andrés Manuel López Obrador durante el siguiente sexenio. El cálculo incluye la reducción del Derecho de Utilidad Compartida (DUC) y las aportaciones patrimoniales a Pemex, las cuales ya han generado costos fiscales estimados en 1.8 billones de pesos.
El CIEP advierte que apoyar financieramente a Pemex y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), mejorar la Red Nacional de Transmisión y Distribución, y mantener los subsidios a las tarifas eléctricas residenciales, representaría un costo fiscal del 1.0% del PIB anual. Este monto se desglosa en 1 billón 371 mil millones de pesos por aportaciones patrimoniales y reducción del DUC para Pemex, 245 mil 680 millones de pesos para que CFE mantenga su participación en la generación de electricidad, 57 mil 665 millones de pesos para fortalecer la Red Nacional de Transmisión y Distribución, y 517 millones de pesos en subsidios a las tarifas eléctricas.
El informe ‘Política Energética. Retos fiscales 2024-2030’ del CIEP también señala que, dado que se prevé una reducción del gasto público del 3.0% del PIB para el próximo año, las acciones propuestas requerirán mayores recursos públicos. Esto implicaría desplazar el gasto social para financiar la continuidad de la política energética actual, planteando retos significativos para las finanzas públicas y la sostenibilidad fiscal del país.
