CÓRDOBA.- El auditorio Dr. Manuel Suárez de la Escuela de Bachilleres Artes y Oficios (ESBAO) está registrado como propiedad del bachillerato. En consecuencia, no puede ser administrado por un particular, como lo ha hecho la Fundación ESBAO desde que recibieron el lugar en comodato.
Durante la Administración del exGobernador Fidel Herrera Beltrán se firmó ese comodato con vigencia por 99 años. El actual Presidente de la Fundación insistió en que no hay motivos para dejar de administrar el inmueble, pues a su consideración se han apoyado con diversos beneficios a las escuelas que alberga el inmueble escolar vecino al Auditorio.
Sin embargo, desde hace varios años, docentes y directivo señalaron el rechazo a dicho comodato.
En junio del presente año, a través de la Dirección del Bachillerato, se giró un oficio al jurídico de la Dirección General de Bachillerato (DGB), a fin de que intervenga en el tema, principalmente porque dicho bien está registrado ante el Programa Integral de Aseguramiento Patrimonial (Sicobip) como propiedad del plantel.
Por cuestiones burocráticas y la lentitud del proceso, hasta la semana pasada se supo de forma extraoficial que la Fundación podría ser requerida en próximas fechas para conocer las condiciones bajo las cuales se les entregó la administración del inmueble.
LES DAN ‘MIGAJAS’
Desde que la Fundación ESBAO recibió el Auditorio para su administración, los alumnos del plantel quedaron condicionados para el uso del lugar.
Con el cambio de Presidente, hace un año, se anunció la creación de un sistema de becas para los alumnos destacados.
A la fecha no se ha retomado, incluso aquellos 100 pesos que les daban a los estudiantes se dejaron de entregar.
Los beneficios que les han dotado a las escuelas son mínimos; el mantenimiento de los centros escolares corre a cargo de los padres de familia.
La información de los ingresos y gastos por mantenimiento no se ha hecho pública. Recientemente, con el festival de Danza de Córdoba, que organiza Martha Sahagún, secretaría de la Fundación, se ocupó dicho espacio para el evento.
Aunque se presume generó una fuerte suma de dinero, estos no se han visto reflejados en mejoras para los planteles o el propio Auditorio, mismo que en su interior sigue funcionando con instalaciones viejas y deterioradas que incrementan el consumo de electricidad.
Pese a toda esta situación y sobre todo ante la lentitud del proceso jurídico para su recuperación, no se descarta que en los próximos meses se retire el comodato.