Luego de que Texas ha frenado la refinación de combustible, las gasolinas que le vende a México podría aumentar pero eso no dispararía el costo de las gasolinas para el consumidor final porque existe un tope de precios máximos y mínimos que no pasa del más menos tres por ciento, señaló Gilberto Bravo Torra, presidente de la Organización de Gasolineros de Veracruz.
Señaló que es posible que haya incremento pero sólo serán unos centavos más.
Asimismo, recalcó que a partir del 30 de noviembre el precio del combustible queda liberado y entonces si podría subir o bajar.