Emilio González Gómez
el buen tono
M. Escobedo.- El frío, la pobreza y la marginación son una combinación fatal, cuyas consecuencias volvieron a sentirse con la muerte de un niño en una comunidad de la Sierra. El infante sufrió intoxicación letal con monóxido de carbono al calentarse su familia con un anafre de carbón.
“El monóxido de carbono es un gas producido por cualquier tipo de combustión que causa síntomas físicos como dolores de cabeza, náuseas y vómitos. Después sobreviene la somnolencia, el desmayo, el coma y la muerte”, añadió, el doctor Demian Díaz de la Luz.
A pesar de las constantes recomendaciones y llamados de Protección Civil para no introducir anafres en el interior de los humildes cuartos, el niño es la primera víctima de la temporada invernal en el municipio.
El galeno, añadió que las temperaturas en la parte alta descendieron hasta cuatro y dos grados centígrados, por lo que familias campesinas de bajos recursos hacen uso del anafre para calentar las viviendas en el invierno.
Finalmente, el líder de la Central Campesina Independiente (CCI), Roque Castillo Pacheco, apuntó que hace falta una campaña y estrategia de concientización para la población del manejo de anafres y fogones, de carbón y leña, al interior de casas.