Córdoba.- En dos meses, Álvaro Antonio Camarillo Sandoval cumpliría 20 años.
Sin embargo, la noche del pasado domingo perdió la vida, al oponerse a entregar el dinero recaudado por la venta de la taquilla del complejo de cines donde se desempeñaba como supervisor de turno.
Ayer, decenas de ciudadanos, entre amigos, familiares, vecinos, conocidos y compañeros de trabajo, le dieron el último adiós.
SE LLEVA SUS SUEÑOS
Álvaro, quien desafortunamente pasó a formar parte de los cientos de víctimas de la delincuencia, vio truncado su sueño de ingresar a la Escuela Naval Militar de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), apenas el año pasado había presentado el examen de selección, mismo que aunque no aprobó, no mermo sus ganas por “salir adelante”, pues esperaba el inicio del ciclo escolar 2016-2017 para ingresar al primer semestre en el Instituto Tecnológico de Orizaba (ITO).
Durante su corto andar por la vida, tuvo el apoyo de su madre Miriam, su padre Álvaro y su hermano -cuate-, Rodolfo Ángel.
Quienes lo conocieron, le recuerdan como un joven “tranquilo”, hace seis años ingresó motivado por su padre al Pentathlón Deportivo Militarizado, donde con el paso de los años y la disciplina, alcanzó el rango de Sargento II y maestro de Banda de Guerra. “Fue un gusto conocerlo, desde hace siete años cuando ingreso al Pentathlón convivimos mucho por los eventos. Así como están las cosas, pedimos que se haga justicia”, dijo, Sergio, vecino y amigo.
ADIÓS. ÁLVARO
Ayer, sus restos fueron trasladados hasta la parroquia del Espíritu Santo de San Román, donde permaneció resguardado por sus compañeros del Pentathlón, ademas de familiares y amigos que se sumaron para despedir al joven.
Durante la celebración religiosa, el sacerdote, Óscar Fabricio Martínez Limón, pidió por la paz y la tranquilidad de las familias.
En su mensaje, dijo que aunque la noticia de una muerte, siempre entristece, se debe recordar que se trata de un paso a la vida eterna.
¡EXIJO JUSTICIA!
En medio de la tristeza por la muerte de un hijo, su padre Álvaro, demandó al Gobierno, esclarezca y dé con los responsables de la muerte de Álvaro. Al llamado se sumaron los presentes, quienes exigieron justicia por el joven.
“La población exigimos una muestra de justicia, que el Gobierno del Estado aclare esto que pasó, es una lástima que le hayan quitado la vida de esta manera, si ya pudieron resolver un caso donde fueron hasta el extranjero a traer detenidos, yo creo que si pueden hacer las cosas siempre y cuando quieran hacer su trabajo”, dijo. Los restos de Álvaro fueron cremados ayer por la tarde, en espera de que sean colocados en un sitio designado por la familia, donde le recordarán como el “héroe” en que se convirtió al dar su vida en contra de los delincuentes.
