Miles de brasileños salieron a las calles el domingo por segundo día consecutivo para pedir el juicio político del Presidente Jair Bolsonaro, acusándole de ser débil ante la pandemia del COVID-19, que ha matado a más de 216 mil personas en el país.
Vehículos tocando el claxon desfilaron por las calles de Río de Janeiro, Sao Paulo y al menos una decena de ciudades más, mientras otros manifestantes marcharon a pie, algunos gritando, “¡Vete, Bolsonaro!”.