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Piden apoyo para niños de Atoyac

Superiberia

Camarón.- El accidente del autobús que el pasado 10 de enero cayó al río Atoyac cambio vidas y dejó cicatrices que difícilmente pueden superar quienes fueron afectados por esta tragedia, principalmente los niños. El dolor se mantiene latente y para los pequeños que perdieron a uno o ambos padres el futuro es incierto, porque aun cuando cuentan con el apoyo de familiares su vida no es la misma a la de un día antes e incluso horas antes de esa tragedia.

 

Duele para los familiares de quienes perdieron la vida en el autobús que trasladaba a la porra y jugadores del Club Deportivo Camarón hablar, el recuerdo trae lágrimas y miedo al futuro que aún es incierto, más para los pequeños que ya no cuentan con los padres para continuar estudiando.

 

Hasta este momento ninguna autoridad del Estado ha pronunciado una beca para que estos menores continúen o concluyan sus estudios, y así el accidente que les cambió la vida no trunque sus sueños y la posibilidad de mejorar sus condiciones de vida.

 

Al menos cuatro chicos de 5 y 21 años perdieron al padre y madre, tienen el apoyo de familiares pero la situación o condiciones no son las mismas, para seguir estudiando y hacer frente a otros gastos que son indispensables. Esto preocupa a los familiares de los afectados, quienes quisieran poder intervenir y se pronuncian para solicitar a Gobierno del Estado les otorgue a estos niños y un joven una beca, una pensión para sus estudios y manutención.

 

Uno de los niños que perdió a sus dos padres es Gael Rodríguez Hernández, de cinco años quien luego de haber permanecido varios días en el hospital hoy se encuentra en casa de su abuelita Lidia Aca, quien tras la pérdida de su hijo ella desconoce qué va a pasar, más porque con el paso de los días la ayuda disminuye y las autoridades no se han pronunciado por los pequeños.

 

La abuelita reconoció que el menor tiene cita para consulta abierta, pero también requiere atención psicológica, el accidente que le cambio la vida a sus cinco años de vida le ha dañado más de lo que uno puede imaginar, ella no quiere perturbarlo, pero tampoco puede superar esta situación que viven.

 

Otros afectados son Luis David y Felipe Bedolla Velasco, quienes perdieron a su padre Jorge Luis Bedolla Mendoza, quienes viven en una situación de escasos recursos, ahora más con la pérdida del jefe de familia que llevaba el sustento.

 

También con esta tragedia, resultó afectado Rodolfo Cortés Acatl un joven, de 21 años, quien estudiaba en el Tecnológico de Orizaba por el apoyo de su mamá Rosa María Cortés Acatl perdió también la vida en este accidente y ahora para concluir sus estudios también necesita ayuda.

 

Por el futuro de estos niños y joven se encuentran preocupados los familiares y amigos que aunque quisieran no cuentan con los recursos para poder atender las necesidades que tienen para salir adelante como era con el apoyo de sus padres antes de que fallecieran, es por ello que hoy  alzan la voz y solicitan la intervención de las autoridades competentes.

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