Orizaba.- La Iglesia Católica inicia el año litúrgico con el primer domingo de adviento por lo que realizó un llamado para no caer en la rutina o por el criterio de que “siempre se ha hecho así”, con ello se exhortó a la población para sacudirse la pereza espiritual y así dar testimonio de la esperanza, así lo manifestó el vocero diocesano, Helkyn Enríquez Báez.
Indicó que es cierto que “se vive en un mundo donde parece que la situación nos confronta, nos puede desanimar y de repente, incluso, en el ámbito de fe hace surgir la duda. Pero hoy hay distintos elementos que nos hace mantener la esperanza”.
Como ejemplo citó la toma de conciencia ciudadana que “a nivel universal se está dando y que exige un cambio porque creen que en otro mundo mejor es posible”, agregó que este es un signo de esperanza porque implica que la sociedad ve siempre a futuro la posibilidad de un cambio siempre para mejorar como humanidad y como sociedad”.
Además, de los movimientos que se dan en la sociedad en favor de la justicia, de la paz, de las mujeres, de la vida debido a que “son un signo de esperanza, la organización pacífica para reivindicar un derecho implica que se busca cambiar para mejorar”
Al igual que sucede con los esfuerzos “para humanizar la globalización del bien, buscando mejores condiciones de vida, mejores condiciones ecológicas, mejores condiciones para los pobres”.