Córdoba.- Un llamado a redoblar esfuerzos y a castigar a los culpables fue la exigencia del obispo de la Diócesis de Córdoba, Eduardo Patiño Leal, ante la ola de secuestros que han azotado la región y principalmente a la localidad.
Durante el fin de semana pasado se dio a conocer la noticia del secuestro de integrantes de la familia Torralba, mismos que se suman a los incontables casos de locatarios del mercado Revolución, así como de algunos ciudadanos cordobeses, los cuales a decir de Monseñor Patiño Leal, es ya una calamidad que en la zona se repitan este tipo de situaciones.
Ante ello, lamentó y condenó los hechos, conminando a las autoridades a reforzar labores, así como a evitar que este tipo de sucesos queden impunes, sobre todo porque son los familiares los que enfrentan con sus propios medios a todos los que comenten delitos en contra de la familia.
“Es momento de redoblar esfuerzos y cuidar mucho que al momento de que se tengan pistas y se logre tener datos comprobables de un posible delincuente que no quede en la impunidad que llegue la justicia”, expresó.
“Una sociedad enferma”
A la par del incremento en lo secuestros, señaló que el aumento en los casos de suicidio en la región, es parte de un fenómeno dentro de una sociedad enferma, donde está perdido el sentido por la vida, poniendo los valores en cosas que talvez no puedan llegar a conseguirse, o en problemas de tipo afectivos.
Indicó que en este tipo de acontecimientos hace falta la madurez de una persona, para poder sobrellevar los problemas que lo orillan a tomar tal determinación, así como la fe suficiente para pedir a Dios el apoyo necesario para salir delante de todo lo que acontece.
El Prelado refirió que lamentablemente, aunado a los problemas morales que han orillado a los suicidas a atentar en contra de su vida, se encuentran factores como el uso de drogas y adicciones que se tienen lo que da a lugar a la pérdida de la cordura de la persona, que derivan en momentos irracionales, buscando el suicidio.
Diócesis de Córdoba
Lamenta tragedia
Córdoba.- Tras darse a conocer la noticia del descarrilamiento de un tren de carga en el que también viajaban migrantes centroamericanos, en el municipio de Huimanguillo entre Tabasco y Veracruz, dejando pérdidas humanas y cientos de lesionados, el obispo de la diócesis de Córdoba, Eduardo Patiño Leal, lamentó que la falta de oportunidades laborales hagan de este tipo de sucesos situaciones penosas que terminan en la muerte.
Al considerar que la vida de un migrante siempre está en riesgo debido a que este se expone a caer de la máquina dada las condiciones del viaje, así como a ser víctima de bandas delictivas que se dedican a extorsionarlos e intimidarlos, el Prelado enfatizó que son actos muy lamentables.
Destacó que ante este tipo de situaciones, se debe atender este fenómeno desde la raíz, ofreciendo fuentes de trabajo dignas y seguras en sus lugares de origen, llamado que ha hecho la Iglesia en reiteradas ocasiones ante los gobernantes.
Yessica Martínez
El Buen Tono
