De la Redacción
EL BUEN TONO
Calcahualco.- A diferencia del 2 de mayo de 2020 y 2021 que se registraron nevadas continuas en el volcán Pico de Orizaba, actualmente la montaña luce seca, lo que aumenta la preocupación de los ambientalistas por las condiciones que aceleran la desaparición del último glaciar.
Lo anterior plantea interrogantes sobre las acciones de los gobiernos municipal, estatal y municipal para contrarrestar la tala clandestina, un problema grave que afecta al Parque Nacional.
De acuerdo con residentes del área, diariamente se extraen decenas de toneladas de madera de forma ilegal del lugar, sin que se tomen medidas efectivas al respecto.
Esta actividad fuera de la ley sigue sin castigo, dejando al descubierto la inacción de las autoridades frente al problema que existe.
La desaparición gradual de la nieve en el Pico de Orizaba tiene implicaciones ambientales, pero también en el ecosistema y en las comunidades que dependen de él.
La extracción de árboles sin los permisos correspondientes afecta la belleza natural del lugar, y contribuye al deterioro del hábitat de diversas especies animales y vegetales, poniendo en riesgo la biodiversidad de la región montañosa.
Necesidad
Es necesario que se tomen medidas urgentes para proteger el Parque Nacional y detener la tala clandestina que lo afecta diariamente.
Esto requiere un compromiso real por parte de las autoridades de todos los tres niveles de gobierno, así como una mayor vigilancia y aplicación de la ley para evitar la explotación ilegal de los recursos naturales.
La comunidad y los defensores del medio ambiente están preocupados por el futuro del Pico de Orizaba y exigen acciones concretas para detener la degradación ambiental y proteger este importante patrimonio natural que existe.