CDMX.– El Gobierno de México, a través de la Procuraduría General de la República (PGR), presumió el domingo pasado el arresto de Tomás Yarrington Ruvalcaba, exgobernador de Tamaulipas, con ayuda de las autoridades de Italia; sin embargo, afirman fuentes de Seguridad Nacional del Gobierno de Donald Trump que la Administración de Enrique Peña Nieto no estuvo involucrada y fueron agentes de Estados Unidos, junto con los del Gobierno italiano, los que lograron la captura del expriista, acusado por nexos con el crimen organizado.
De acuerdo con Breitbart Texas –el polémico portal de ultraderecha, dirigido por un asesor de Trump en la Casa Blanca-, “las tensiones diplomáticas entre EU y México se han levantado en este caso, pues la Administración de Peña Nieto “intenta mantener a un político corrupto lejos de la extradición a EU, donde él tiene cargos por narcotráfico y lavado de dinero”.
Breitbart Texas reveló que fueron los agentes investigadores de Seguridad Nacional de Estados Unidos, destacados en Brownsville, Texas, los que junto con las autoridades de Roma localizaron a Yarrington.
Y destaca: “Las autoridades mexicanas no jugaron ningún papel en el arresto”.
El ex-Gobernador fue trasladado a la cárcel de Sollicciano, la prisión más grande de Florencia.
PROTECCIÓN DEL PRI
El actual Gobernador de Tamaulipas, el panista Francisco García Cabeza de Vaca, aseguró que hasta octubre del año pasado Tomás Yarrington contaba con escoltas asignados por el Gobierno del Estado, entonces encabezado por el priista Egidio Torre Cantú.
MÉXICO Y EU LO PIDEN
La PGR informó que el Gobierno de Italia tendrá que evaluar a qué País será extraditado Yarrington, pues tanto México como EU cuentan con notificación roja de Interpol
Por la gravedad de los diferentes delitos, en México podría pasar 20 años en prisión y en Estados Unidos es de dos cadenas perpetuas.
Se sometió a cirugías
La Policía de Italia reveló que el ex-Gobernador evadió dos inspecciones al presentar una credencial apócrifa con los apellidos Morales Pérez.
Y se tiene un indicio de que se realizó cirugías faciales para evitar ser identificado.