El conflicto en Ucrania ha cobrado una vez más la vida de un periodista ruso, Nikita Tsitsagi, quien fue víctima de un ataque con drones mientras se preparaba para realizar un reportaje en la zona del monasterio de San Nicolás, cerca de Vugledar. Este trágico incidente se suma al reciente fallecimiento de otro corresponsal ruso cerca de la línea del frente, marcando una semana oscura para los medios de comunicación.
Según el medio News.Ru, el ejército ucraniano habría apuntado deliberadamente al periodista, en medio de intensos combates que han convertido a Vugledar en un punto crítico desde hace meses. La portavoz del Ministerio ruso de Relaciones Exteriores, María Zajárova, condenó el ataque y acusó a Kiev de ser responsable de ambos incidentes recientes.
Este trágico suceso subraya el peligro constante que enfrentan los periodistas que cubren conflictos armados. El presidente Vladimir Putin lamentó la pérdida, recordando que al menos treinta periodistas rusos han perdido la vida desde el inicio del conflicto en Ucrania.
Mientras la comunidad internacional condena estos actos y exige investigaciones exhaustivas, seguimos atentos al desarrollo de esta situación y al impacto en la libertad de prensa en la región.
