Agencias
México.- Los aspirantes a la dirigencia nacional del PAN, Jorge Romero, Adriana Dávila Fernández, Damián Zepeda Vidales y Kenia López Rabadán, han coincidido en calificar la coalición electoral con el PRI como un error histórico y una incongruencia. En entrevistas recientes, todos han expresado su convicción de que, de llegar al liderazgo del partido, romperán lazos con el tricolor en términos electorales. Consideran que esta alianza ha diluido la identidad del PAN y han señalado que, mientras mantendrán una alianza legislativa estratégica, el PRI podría aliarse con Morena, lo cual sería contraproducente para los intereses de México.
Jorge Romero, actual coordinador de la bancada panista en la Cámara de Diputados, ha enfatizado la necesidad de que el PAN reconsidere su posición y recupere su identidad política. Según él, la alianza con el PRI ha desdibujado la imagen del partido ante el electorado, y es crucial para el futuro del PAN poner una pausa en dichas alianzas electorales.
Adriana Dávila Fernández también ha criticado la coalición con el PRI, argumentando que fue uno de los factores determinantes en la derrota del PAN en las elecciones recientes. Ella y otros aspirantes ven en el proceso de renovación de la dirigencia del PAN una oportunidad para rectificar el rumbo y volver a las raíces ideológicas del partido, sin compromisos que desdibujen su perfil de centro-derecha.
Damián Zepeda Vidales, senador y también aspirante a dirigir el PAN, ha catalogado la alianza con el PRI como un fracaso rotundo, argumentando que ha disminuido drásticamente el número de gobiernos estatales en manos del PAN. Zepeda ha subrayado la importancia de mantener una postura clara y congruente frente al gobierno, sugiriendo que la coalición con el PRI no solo fue un error estratégico, sino que también afectó la credibilidad del PAN como fuerza opositora efectiva.
Kenia López Rabadán, senadora y posible contendiente por la dirigencia, ha instado a que el PAN se desmarque de alianzas electorales futuras con el PRI. Enfatiza la necesidad de un mensaje claro y coherente ideológicamente, reafirmando que el PAN debe defender sus principios históricos sin desviarse hacia posturas que podrían confundir al electorado. López Rabadán ha llamado a los legisladores del PAN a mantener una postura ética y moralmente fuerte para servir como contrapeso legislativo efectivo.
En resumen, los aspirantes a la dirigencia nacional del PAN están unidos en su crítica hacia la coalición con el PRI y en su llamado a redefinir la estrategia electoral del partido. Consideran que el PAN debe recuperar su identidad ideológica y evitar compromisos que puedan comprometer su papel como alternativa clara al gobierno actual.