Una gran celebración ofreció recientemente la familia Zaballa Farías, ya que su pequeño Pepito, de tan sólo seis meses de edad, fue llevado a la pila bautismal para ser convertido en hijo de Dios.
Ante ese acontecimiento especial en la vida de Pepito, sus papás Zenia Farías de Zaballa y José Zaballa Domínguez, eligieron la iglesia de San Rafael Guizar y Valencia como recinto para que su heredero recibiera el primer sacramento.
Francisco Domínguez Serna y Marisol Nieto de Domínguez fueron elegidos como padrinos del pequeñito, aceptando con ello la responsabilidad de conducirlo por el camino del bien así como de apoyarlo en cada una de sus decisiones.
Después de ser partícipes de la celebración, familiares y amistades se trasladaron hasta un conocido rancho de la ciudad, en donde compartieron una exquisita comida ofrecida en honor al tierno Pepito y disfrutaron de un gran ambiente como parte de lo preparado para ese día especial.
Mónica Chico
El Buen Tono