Por: Filiberto Vargas Rodríguez / columnista
Prefacio
¡Felicidades! Es justo hacer un público reconocimiento a nuestra Policía Estatal. ¡Finalmente dieron un fuerte golpe a la delincuencia que mantiene aterrorizada a la población!
Este sábado, al menos 50 elementos de la corporación que dirige Jaime Téllez Marié dieron una demostración de su capacidad y de su arrojo, al someter -no sin algunos apuros, hay que reconocerlo- a una “peligrosa” mujer que los amenazó con su teléfono celular. Los uniformados debieron asumir que se trataba de un “halcón” (el escalón más bajo dentro del crimen organizado, que se encarga de vigilar la actuación de las Fuerzas del Orden para prevenir a sus compañeros si se llegan a acercar demasiado). Verónica Rocío Huerta dejó la comodidad de las entrevistas “de café” en Xalapa y se fue allá, donde los pobladores de Casitas salieron a protestar por la falta de apoyo del Gobierno Estatal, luego de los daños que dejó a su paso el Huracán Franklin. Cansados de esperar y de ser ignorados por las autoridades, pescadores, amas de casa y niños salieron a la carretera y la bloquearon, convencidos de que con esa medida llamarían la atención del Gobernador.
¡Y vaya que lo lograron! Varias unidades de la Fuerza Civil y de la Policía Estatal hicieron acto de presencia para “convencer” a los pobladores de que desalojaran la carretera. Fue en ese momento cuando detectaron que la reportera registraba todo con su celular. De más está repetir los improperios que recibió Verónica. Lo realmente grave fue la agresión física, la destrucción de su teléfono, la obstrucción de su trabajo, la represión a su libertad de expresión.
A prudente distancia, en el papel de espectadores, elementos de la Policía Federal ratificaban los acuerdos de coordinación con las fuerzas estatales: “Nosotros no nos metemos”.
Hoy los delincuentes deben estar temblando, quizá muchos hayan emprendido la huida. Los “muchachos” del desvelado Téllez Marié se vistieron de gloria, y su jefe fue defendido y felicitado por el Gobernador. ¿Qué más pueden pedir?
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El papel preponderante que jugó el senador veracruzano Pepe Yunes Zorrilla en la Asamblea Nacional del PRI, despeja muchas de las dudas que se habían ido generando entre los veracruzanos que militan o simpatizan con ese partido.
Para casi todos está claro que Pepe Yunes “es el bueno”, están convencidos de que “ya le toca”, pero siguen sin comprender porqué no acelera el paso, a qué se debe tanta prudencia, cuando otros aspirantes ya han hecho sonar las campanas llamando a la rebelión.
Interrogado una y otra vez sobre sus aspiraciones políticas, Pepe Yunes admite, sin sonrojo alguno, que quiere ser Gobernador y que las circunstancias “parecen estarse dando” para que busque esa oportunidad el próximo año, pero también aclara: “No son aún los tiempos; yo soy y seré siempre, respetuoso de los tiempos que marca mi Partido”.
Pues los tiempos parecen estar a la vuelta de la esquina, y las primeras señales ya se dieron, desde el centro del poder político.
“Quien pronosticó fracaso, erró. Quien profetizó farsa, se equivocó”, sentenció Pepe Yunes Zorrilla frente a los delegados priistas de todo el País, al presentar las conclusiones de la Mesa Temática de Programa de Acción, que a él le tocó presidir.
Pepe Yunes fue el único priista veracruzano con un papel preponderante en esta asamblea. Fue tal la distinción en el trato, que su compañero de bancada, Héctor Yunes Landa, prefirió no asistir, pues su presencia haría más evidente que hoy los astros del PRI están alineados a favor del oriundo de Perote.
Hace tiempo que Pepe Yunes trabaja para la construcción de su candidatura, pero –a diferencia de su amigo Héctor- no lo ha hecho a través de los medios de comunicación. Él ha asumido que el mejor camino (aunque tal vez no sea la ruta más corta) es el de trabajar por los veracruzanos, desde su propia trinchera. Aportar su esfuerzo para que Veracruz avance.Pescadores, petroleros, cañeros, citricultores, ganaderos o habitantes de colonias marginadas, entre muchos otros, se han acercado a Pepe Yunes y han encontrado a alguien que los escucha y que trabaja con ellos para gestionar –y conseguir- las acciones más urgentes para su entorno. El Presidente Enrique Peña Nieto fue contundente. Dijo que el PRI asumió distintos costos en el camino, lo que les da autoridad moral para recuperar la confianza de la gente. “Los priistas estamos obligados a defender y proteger lo construido; preservar la unidad para servir al País. Cerrar filas dentro del Partido es cerrar filas a favor de México”, afirmó.
Hoy en la capital del País (en Los Pinos, en Bucarelli y en el Comité Nacional priista) están convencidos de que deben ofrecer a la población un nuevo rostro, sin mácula, alejado de ese priismo corrupto, egoísta, alejado de las causas sociales.
En esa línea, cuando analizan Veracruz lo tienen claro: Pepe Yunes es la mejor opción.
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Y mientras las huestes de Téllez Marié demuestran su valentía agrediendo a mujeres, su jefe, el Gobernador de Veracruz hace una demostración del respeto a la vida, del rechazo a la tortura y a la violencia… contra los animales. Miguel Ángel Yunes Linares anunció que vetará reformas a la Ley que autoriza las peleas de gallos y vaquilladas. “Los veracruzanos ya no queremos violencia y crueldad contra los animales”, dijo. (Eso sólo opera contra los seres humanos). El problema con el anuncio de veto de la reforma a la Ley de Protección a los Animales, es que dichas modificaciones fueron propuestas y promovidas por un Legislador del PAN, que ahora se queja de que no le dieron “línea”. El diputado panista Daniel Olmos Barradas, autor de la Ley, es el más dolido y dice haber “quedado en ridículo”. Alguien le tiene que explicar que así era la jugada. Si el Gobernador les hubiera enviado la instrucción de que bloquearan dicha iniciativa, nadie se iba a enterar, nadie reconocería el “espíritu animalista” del Gobernador. Era importante que la iniciativa pasara, que fuera aprobada, para –entonces sí- llamar a conferencia de prensa y anunciar su veto. Al viejo estilo priista, el juego se llama “crear conflictos para resolverlos”.
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El Tribunal Electoral de Veracruz está tomando decisiones difíciles, pero justas. En Camarón de Tejeda se cumplieron los dos criterios para anular una elección: Se acreditó que la candidata vencedora rebasó del tope de gastos de campaña en un 334.76% y que su triunfo frente al rival más cercano se dio por una diferencia menor al 5%. La elección deberá repetirse, ya sin la participación de Norberta Palacios Molina, candidata de Movimiento Ciudadano (MC). Y en Emiliano Zapata, el Tribunal Electoral ratificó el triunfo de Jorge Alberto Mier Acolt, abanderado de Morena. A pesar de anular 262 votos y corregir la suma de votos de cada contendiente, los magistrados acordaron ratificar el triunfo de Morena.
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