WASHINGTON.- El Cártel de Sinaloa, liderado por los hijos de Joaquín El Chapo Guzmán, lucha contra el Cártel de Jalisco Nueva Generación, por el reino de la heroína de Estados Unidos, un territorio antes dominado por las bandas colombianas que ha pasado a manos mexicanas, según dijo a Efe un portavoz de la DEA.
El Cártel de Sinaloa sigue siendo una de “las mayores amenazas” para EU, pues el tráfico de heroína se ha incrementado a pesar de la captura de El Chapo y la posibilidad de que sea extraditado a territorio estadounidense, según destacó uno de los portavoces de la Agencia Antidrogas Estadounidense (DEA), Russell K. Baer.
“El Chapo puede estar en custodia y puede que haya sido sacado de su liderazgo, pero sus hijos están muy envueltos en la actividad criminal del Cártel”, aseguró Baer.
En concreto, el agente de la DEA apuntó como cabecillas de una de las facciones del cártel de Sinaloa a dos hijos de Loera: Iván Archivaldo Guzmán, conocido como el Chapito, y Jesús Alfredo Guzmán, alias El Alfredillo, quien en agosto fue secuestrado y luego liberado por el Cártel de Jalisco.