Zongolica.- El tributo a la Madre Tierra se practicará el día 31 de diciembre para despedir el año y pedir por la paz entre los pueblos de todo el orbe.
El Xochitlallis se realiza al inicio del ciclo agrícola, el primer viernes de marzo, sin embargo, lo usan en ceremonias de agradecimiento y para peticiones especiales.
Solicitar permiso a la Madre Tierra o a la Pachamama, como también se le llama en la zona náhuatl de Zongolica, es un rito ancestral, donde se alimenta al planeta; en este mes lo utilizarán para pedir por la paz mundial.
A lo anterior se le suma la práctica prehispánica de Xochicoscatl, que representa la bienvenida a los visitantes distinguidos, se trata de tradiciones arraigadas y que se seguirán conservando en la Sierra de Zongolica.
En los pueblos originarios, la ceremonia la encabezan las personas de edad avanzada, los adultos mayores, son ellos quienes se encargan de brindar el tributo a la Tierra y pedirle permiso para que les dé una buena cosecha.
La ofrenda consiste en hacer una cavidad en el suelo, presentar granos de maíz, frijol, café y otros productos como mole, tamales, pulque y cervezas.
Además esparcen incienso, encienden veladoras, colocan flores y cantan para dar gracias por las siembras y tributo por la del año que inicia.
Durante el evento, el hombre antiguo del pueblo realiza la apertura, dando gracias con el incienso hacia los cuatro puntos cardinales.
Las mujeres colocan entonces los collares de flores a las personas participantes al ritmo de la música que soneros tradicionales entonan.
Al colocar la ofrenda, todos danzan de un lado a otro alrededor de ella, proceden a encender las velas que significan luz que se requiere para que todo esté bien durante los próximos 12 meses.