Cordoba.- La Iglesia Católica está haciendo todo por erradicar los actos de pederastia cometidos por parte de los sacerdotes, aseveró el nuncio en México Franco Coppola, quien reconoció que es una vergüenza que se den estos casos, comparándolos con una enfermedad que se propaga o una herida que no sana.
En su visita a Córdoba para encabezar la recepción del obispo coadjutor, Eduardo Cirilo Carmona, el representante de El Vaticano en México, exhortó a los afectados a denunciar estos casos.
“Es algo doloroso, vergonzoso, la misión de la Iglesia es hacer presente a Dios que salva, que cura, que ayuda”.
Esos sacerdotes, dijo, que hacen todo lo contrario, que en lugar de salvar vidas, le roban la inocencia a los niños y niñas, son una vergüenza, reiteró.
Y es que reconoció que este tipo de actos son peores, aún más que matar a alguien, ya que es una herida con la que seguirán viviendo, en lo que a la Iglesia corresponde mencionó, será el Papa quien decida cómo hay que juzgar desde El Vaticano para asegurar que se rompa con este círculo vicioso.
En cuanto al panorama que se tiene de forma general, expresó que la Iglesia en México desde el inicio de este Gobierno ha decidido tomar la postura de no juzgar antes de ver lo que se realiza.
“En México no se trata de prender o apagar la luz, como un interruptor, es algo más complicado, seguimos observando y dando ayuda donde podemos”.