Nos hemos olvidado de algunos tópicos en su momento de importancia, o carecemos de un verdadero deseo de cambio o somos más bien apegados a la moda, como sea, las cuestiones están aquí.
-¿Qué pasó con el señor que atendía un refugio de animales y que el alcalde Tomás Ríos mandó a despojar del mismo no bastándose con ello para también desprenderle la concesión de unos baños con los que se hacía de cierto sustento? Afirmo que ha sido él puesto que tras de enterarse de la situación no he movido un dedo para ayudar, ni nada similar.
-¿A cuánto asciende el monto que los operativos de alcoholímetro y roba-levanta-motos generan mes con mes y qué destino tiene? Porque seamos sinceros, lo de hoy es tener un negocio de grúas para forrarse en el menor tiempo posible y, aunque algunos motociclistas pecan de estúpidos sin usar equipo de seguridad, muchos otros en regla sufren el despojo de sus vehículos arbitrariamente. ¿Qué le hacen a esas miles de toneladas de motocicletas que el propietario ya no recupera por ser mucho más caro que comprarse una nueva?
-¿Cómo va ese dichoso estudio sobre los innecesarios topes en el bulevar Tratados de Córdoba? ¿Ya se dieron cuenta que los tienen que quitar o todavía están examinando con cautela sus propiedades cuánticas? El dato es universal, entre más topes atraviesas mayor es el gasto de combustible lo que puede indirectamente beneficiar a las gasolineras, que ahora tenemos más de ellas en la ciudad que universidades, ya compiten con la cantidad de OXXO’s.
-¿Hasta cuándo van a dejar en el archivo el paso peatonal que destruyeron en el parque de San José y cómo ha sido posible semejante ultraje a la sociedad? Voy a ser claro, el parque luce renovado, no mejor. Lo moderno -en un pueblo que pretende parecer ciudad- no necesariamente es mejor. Preferible siempre será el viejo adoquín, las viejas calles y los viejos árboles que nos han acompañado durante la infancia y a los que podemos llevar a nuestros hijos a compartir ese mismo ambiente que una vez disfrutamos. Hay que ser verdaderamente estúpido para creer que un montón de florecitas en vez de una rampa para discapacitados y cruce de calle, es más funcional.
-¿Qué tienen en común un cuerpo putrefacto en el río todos los días y los reyes magos? Que para el gobierno los dos no existen. ¿Y un secuestro por semana en Veracruz con una caja de cartón? Pues que para el gobierno, ninguna de las dos cosas es importante.
-¿Recuerdan el plantón de maestros frente al Palacio de Gobierno? Tomás Ríos tampoco.
-¿Cuántas décadas más va a estarse prudriendo la ex Hacienda de Toxpan y dentro de ella las antiguas fuentes que adornaban el parque 21 de Mayo? Hace poco leí que en el Ayuntamiento reconocían que las “fuentes secas” (para los que no lo saben, algún imbécil tuvo la innovadora idea de crear una fuente seca, una fuente sin agua, es como una cerveza sin alcohol o un tope en autopista) tenían que ser removidas. No sé si van a traer las que quitaron, absurdo impensable para el emancipado ego de los de Obras Públicas, pero sí sé que el dinero gastado en quitar y poner debería saberse…
Anécdota
El otro día me tomé un café y llegó alguien a preguntarme si yo era Amolián Elvéin. Tímidamente confieso, respondí que sí y mi mente ya estaba analizando el entorno por si era un Dementor del gobierno, de hecho, ya había contemplado dos o tres opciones de escape. Me felicitó por los contenidos que en El Buen Tono estamos generando. No puedo tomar crédito de la idea en los especiales ya que no ha sido mía, yo solo me pongo a hacer dibujitos en la computadora sobre temas que me solicitan. Pero me ha dado mucho gusto ver que está llegando nuestro trabajo a donde tiene que llegar. Después me preguntó el por qué había dejado de escribir Marginalia; amigo, yo tampoco sé pero aquí está, a tu salud.
Hipocresía
Recuedo cuando llegó Lavín a San Román y en la calle de San Lorenzo, donde termina y comienza Córdoba 2000, era seguido por un séquito de aplaudidores mientras estaba mandando tirar árboles con más de 20 años de antigüedad. Fui y le dije que era un estúpido, las palmeras son para el puerto, nosotros somos un valle rodeado de montañas. Llegaron dos amigos suyos y me hicieron a un lado no de manera amistosa. Muchos meses después parece que él y todos los gobernantes estudiaron en la misma prepa porque la tendencia es la misma, destruir nuestros árboles para poner esas ridículas palmeras por todos lados. Es una pena; una verdadera pena. Parques y Jardines debió ir a algún curso de “cómo llenar de palmeras una ciudad y robar en el proceso”. En unos meses más de seguro podan todo Paso Coyol para sembrar palmeras y hasta una playa artifical van a querer poner. Con este gobierno corrupto, opaco y absurdo todo es posible.
También pude ver una nota sobre unos migrantes de Honduras que se quejan de discriminación porque no les permiten pedir dinero. Si pasáramos menos tiempo ayudando a los de afuera y ayudáramos a los de adentro, la ciudad crecería. En muchos países mendigar es delito y te vas a la cárcel. No veo que les falten los brazos o las piernas para ponerse a trabajar y hay personas sin brazos o piernas que son genialidades. Y si salen con que no tienen papeles, hay muchos trabajos que no requieren contratos, conozco a alguien que vivió en la calle algún tiempo y antes que pedir dinero y dar lástima limpiaba jardines, lavaba trastes en el mercado y hacía mandados para poder salir adelante. Ahora dicen que es escritor y diseñador gráfico de primer mundo.
Ahí se los dejo de tarea.