
Amatlán .- El parque de la congregación de Peñuela, un espacio de convivencia familiar y esparcimiento para los habitantes, se ha convertido en un lugar inseguro y abandonado debido a la falta de mantenimiento de las luminarias.
A pesar de las múltiples quejas de los vecinos, el gobierno municipal, encabezado por Luis Arturo Figueroa Vargas, no ha tomado acciones concretas para resolver el problema, dejando a la comunidad en el abandono.
Desde hace dos meses, las luminarias del parque presentan fallas, dejando amplias zonas en completa oscuridad durante la noche. Esto no solo ha reducido la afluencia de visitantes, sino que ha incrementado la inseguridad.
