Una pareja de rayas que habita en el Acuario de Kagoshima (Japón) desde 1997 pertenece a una especie previamente no descrita, determinaron científicos japoneses.
Durante más de 20 años, los peces, que prefieren yacer en el fondo, no atrajeron mucha atención del público. Se pensaba que los animales —llevados a las instalaciones tras ser capturados en el océano— eran peces guitarra gigantes, unas rayas parecidas a los tiburones que viven en las costas occidentales del océano Índico, informa el periódico Asahi Shimbun.
No obstante, hace unos años el biólogo Keita Koeda, del Instituto de Investigaciones Biológicas Kuroshio, examinó los dos especímenes y descubrió que diferían de los peces guitarra gigantes. En particular, sus cabezas no son tan agudas y sus aletas dorsales son más redondas. Asimismo, se distinguen por su coloración, que incluye manchas características en el disco dorsal y en la superficie inferior del hocico.