Córdoba.- En total opacidad, Tomás Ríos entregó a empresarios el usufructo del mobiliario urbano de la ciudad por 20 años.
Los parabuses nuevos de aluminio pudieron haber sido licitados y con ello el Ayuntamiento haber obtenido una mayor ganancia que la simple colocación de la infraestructura y un mínimo porcentaje de espacio para la publicidad; en lugar de ello, Tomás y sus secuaces prefirieron entregarle a sus amigos el espacio público, sin darle oportunidad a más empresarios a participar y ofrecer mejores condiciones, más ventajosas para el Ayuntamiento.
Dichos anuncios en las paradas de autobuses mejor conocidos como “Parabuses”, fueron otorgados en concesión por Tomás@elalcahuetedePortillayLavín en sesión de Cabildo a Adrián Marenco, Joaquín Ruiz y Jaime García por 20 años.
Esto pasando por aprobación del Cabildo en la Administración pasada, sin pagarle nada al Ayuntamiento y “colgados” del alumbrado público, el cual termina pagando el municipio, teniendo como única obligación con la ciudad de Córdoba y sus habitantes otorgar el 30% en publicidad sólo para cultura.
Mientras que otro porcentaje similar de anuncios luminosos colocados por toda la ciudad, en las banquetas y los camellones que en algunas ocasiones obstruyen la vialidad y la visibilidad, fueron otorgados a Francisco Jiménez Balmori, bajo las mismas condiciones.
Finalmente, Joaquín Ruiz es quien pretendía, junto con Martha Sahagún, obtener el comodato de la exHacienda de Toxpan, pretendiendo beneficiarse de otro bien público y enriquecerse ilícitamente a ‘costillas’ de los cordobeses.
