En su tradicional rezo del ángelus este domingo, el papa Francisco volvió a hacer un enérgico llamamiento por la paz, destacando la creciente preocupación por los conflictos armados en todo el mundo. Desde la ventana del palacio apostólico, el pontífice expresó su pesar por el nivel alarmante de tensión en los frentes de guerra, instando a que se escuche el clamor de los pueblos que anhelan la paz.
“Lamentablemente, en los frentes de guerra la tensión es muy alta. Que se oiga la voz de los pueblos que piden la paz”, declaró Francisco, subrayando la necesidad de no olvidar a las naciones que más sufren. El papa mencionó específicamente a Ucrania, Palestina, Israel, Myanmar y otras regiones devastadas por la guerra, pidiendo oraciones para las víctimas de estos conflictos.
Este nuevo llamado a la paz se produce en un momento especialmente crítico para Oriente Medio, donde Israel enfrenta un conflicto en dos frentes: en el norte, contra Hizbulá en el Líbano, y en el sur, contra Hamas en Gaza. La ofensiva israelí ha dejado un saldo devastador de más de 41.400 palestinos muertos, en su mayoría mujeres y niños.
Francisco, visiblemente afectado por la violencia y el sufrimiento humano, lamentó: “¡Cuántas personas sufren y mueren por las luchas de poder! Son vidas que el mundo rechaza, como rechazó a Jesús. Cuando fue entregado en manos de los hombres, Él no encontró un abrazo, sino una cruz”.
El mensaje del papa es un recordatorio conmovedor de la urgencia de buscar soluciones pacíficas en un mundo que sigue desgarrado por conflictos que cobran un precio altísimo en vidas humanas.